era verano
pero parecia primavera
y entre tanto barullo
aparecio el silencio
y con el silencio
una rafaga de viento tibio
que en la noche callada de buenos aires
dejo escuchar el llamado del angel
de cada balcon con un llamador de angeles colgado
y sonó una melodía mezcla de aquel sonido
y del sonido de hojas frescas
que posiblemente
nunca jamas olvide
a la hora exacta
cuando los amantes se despedían, y volvían a sus casas
a la misma hora
que mi cabeza estaba por explotar
esa brisa
paralizo mi vida
y convirtio ese momento
en único
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